Señorita: el que le escribe es aquel de la otra vez, espero
recuerde.
Para darle una idea si es que aun no aparezco en su
imaginación, soy ese tipo flaco, aburrido con ojos tristes y nostálgicos, los
mismos ojos que Uds. (sabrá algún ángel o demonio porque), puede hacer brillar
cuando se le antoja.
Claro que este don no debe ser nada extraordinario o
exclusivo para mi persona, me veo entonces en la obligación de hacerle recordar
algún otro pasaje de ese tiempo que llamamos pasado.
Recuerda usted El
muchacho que la tomo de la mano en su terrible ciudad, el tipo de pueblo que
observaba con ojos desorbitados los edificios?
Recuerda cuando caminaba silbando como si estuviese sola,
recuerda que era yo callado, que la abrace en el frío de la noche?
Por favor dígame que recuerda la tarde en el parque, que
recuerda el olor a hierba húmeda y mis pantalones manchados por el verde. Que
recuerda que una vez pensó que podría ser que yo despertara un cierto sonido o
juego en su interior
Si necesita más información, soy el que de noche interrumpí
en más de una oportunidad su sueño para pedirle abrazos y para preguntarle si
me quería.
Ahora pienso que debe estar al tanto de quien soy, si, es el
mismo que la sueña, de noche y varias oportunidades de día, solo le quería
decir de esta manera, porque me parece la mejor, que si siente en la tarde una
brisa fresca puede que sea yo, que el azar a hecho que yo elija su figura para
abrazar y que mis abrazos son tan exclusivos que no reparan en distancias y no
entienden de horarios de trabajo o de siesta, ni mucho menos de lógica
Quería comunicarle de manera clara y concisa, que a veces
llueve no solo afuera, sino también dentro mío, que mi sensación térmica es la
del polo sur (que creo es similar a la del polo norte) porque no esta conmigo,
que mis sabanas guardan su perfume, y disculpe esto ultimo pero solo mi
imaginación puede sentirlo.
Que como dije en muchas oportunidades la extraño.
Pero con todo esto no quiero ponerla en apuros ni mucho
menos, no pido que deje su vida y sus problemas para venirse aquí conmigo, no,
de ninguna manera exijo nada de su boca que no sienta su pecho, o su adentro,
ese vinculo pensar, sentir
Solo digo que espero volver a tomarla de la mano por las
calles de San Telmo, que espero guarde el muñequito que gane para usted. en una
maquina de alguna calle olvidada, que vuelva a reírse conmigo, que me gustaría
que siga siendo la misma, esa cálida muchacha de ocurrencias ingenuas y dulces
que en otro tiempo se tomo el trabajo de hacerme sonreír
Nada más, ahora me voy afuera… como dice usted. el sol esta
lindo